Sorprendentemente entretenida, el thriller de acción finlandés hace su propia justicia en el arte de derrotar a los peores villanos de la historia de la humanidad. Sisu, se abre camino entre lo serio y lo absurdo, galopando con un sentido de la épica fenomenal.
Las atrocidades que ha cometido la Alemania nazi durante la segunda guerra mundial son fuente de inspiración de varias películas del siglo XXI para justificar la venganza de los peores villanos que han tenido la humanidad. Dentro de un contexto histórico real pero con personajes e historias ficticias, las narrativas allí previstas giran hacia el entretenimiento en sí mismo, donde lo posible y absurdo tienen límites contiguos. En esta línea de expresión se encuentra Sisu, un thriller de acción violento, sangriento y exagerado que representa la derrota nazi en un viajo épico fenomenal.
Contada en siete capítulos, la trama se abre con un minero finlandés que encuentra oro en los campos de Loponia, durante la retirada de la Alemania nazi en 1944. Mientras los despiadados nazis intentan apoderase del tesoro, el veterano excavador saca a relucir una serie de habilidades que lo hacen evadir de la muerte. Cuando los villanos descubren que el hombre al que le robaron es el legendario héroe de la “Guerra del Invierno”, comienza una despiadada y sangrienta cacería, llena de sorpresas y acción épica que los fanáticos de la acción no pueden dejar pasar.
La dirección de Sisu, a cargo del finlandés Jalmari Helander es sumamente atractiva en lo visual, con locaciones que representan bellos y desolados paisajes de Laponia, mientras un pelotón de despiadados nazis avanzan destruyendo todo a su paso. Aquí, el cineasta es hábil en la representación de la paleta de colores, dejando el tono más sombrío en los campos de retirada nazi , en donde fluye la gran parte de las secuencias de acción.
Las sorpresas no tardan en llegar y cada uno de los capítulos del film muestran una energía épica, en ocasiones extravagante, aumentada por las situaciones de supervivencia que atraviesa el personaje. Aatami Korpi (Jorma Tommila) es un veterano minero aislado en los campos de Laponia, en compañía de su perro. Cuando los nazis se apoderan de lo ajeno y descubren que aquél pertenecía a un antiguo grupo comando finlandés, el film se vuelve violento, sangriento y brutal.
Hay un punto donde la función del entretenimiento se desvía hacia lo extravagante, y que bien puede ser marcado como poco realista. Pero en su defensa se puede argumentar que el film no se toma demasiado en serio a sí mismo. En este punto hay una evidente inspiración en películas como Rambo, John Wick y Bastardos sin Gloria (la de Tarantino) y es por ello que no se puede negar la naturaleza convincente de la película en general.
Sisu cuenta con pocos diálogos. A Tommila se le asignaron aproximadamente tres líneas, pero su presencia es firme y convincente en pantalla. La determinación de su supervivencia se exhibe en el castigado cuerpo del personaje en la que el interprete solo le basta su solida actuación facial. Llegado el momento de la acción, las escenas se vuelven brutalmente violentas. Algunas algo sanguinarias, con un exceso de sangre gore que sirve para glorificar la cacería nazi. Con todo lo dicho, Sisu tiene una historia sencilla par contar que logrará cautivar a cualquier fanático del cine de acción.
RESUMEN
En definitiva, Sisu, a pesar de sus momentos extravagantes, reúne los mejor del cine de acción con un historia de supervivencia bien ejecutada y un sentido de la épica fenomenal, que logrará entretener de principio a fin.